El pasado mes dijimos que la hipertensión era una de las principales causas de la enfermedad renal crónica. Pues aquí tenemos otra de las principales causas: la diabetes. Se estima que provoca un tercio de los casos de ERC. Por eso, si tienes diabetes, es muy importante controlar los niveles de glucosa en sangre (la glucemia). Y si no padeces diabetes, puedes controlar la ingesta de azúcares, no abusando de las bebidas azucaradas como por ejemplo los refrescos.
